Alfonso Busquets, experto en prevención de riesgos de la Usach, aseguró que si un vehículo de traslado de escolares no cumple con todos los requisitos estipulados en la normativa, debe ser marginado y no ser contratado, ni por el colegio ni por los padres, aunque resulte más económico.
Consternación produjo esta mañana el accidente de tránsito entre un furgón escolar y un bus del Transantiago que hasta el momento deja un saldo de dos niños muertos y 6 heridos graves. El vehículo escolar, que no respetó un disco pare, no contaba con cinturones de seguridad para los niños que, en este caso, eran pequeños de sólo entre 6 y 12 años de edad.
Alfonso Busquets, docente del postítulo en Prevención de Riesgos de la Universidad de Santiago de Chile (Usach), aseguró que hay una norma para este tipo de transporte que es muy clara y que debe ser respetada por los conductores. Entre otras obligaciones, contempla el uso de baliza, color amarillo, cinturones de seguridad para todos los pasajeros y asientos especiales para niños pequeños. No obstante, a su juicio, la primera responsabilidad es de los colegios y de los padres, pues son ellos quienes deben velar por el cumplimiento de las normas de seguridad.
“Los directores de los establecimientos educacionales no pueden aceptar que cualquier vehículo se instale fuera de su colegio sin estar autorizado, por lo mismo, deben contar con un listado detallado de los transportes que sí lo están y que, necesariamente, deben cumplir con la norma de seguridad. Al hacerlo se segrega de inmediato a los que no cumplen”, aseveró Busquets.
La segunda responsabilidad, aunque no menos importante, es de la familia del escolar, asegura el experto de la Usach. “Los padres tienen que saber en qué vehículos están siendo transportados sus hijos y quiénes los conducen, no pueden desentenderse; es su responsabilidad. La calidad de los conductores es otro aspecto que no se debe descuidar”, enfatizó.
Pese a lo lamentable de este accidente y sus consecuencias, Alfonso Busquets cree que el sistema de transporte escolar del país es seguro y por ello no se debe poner en cuestión, sino que basta con hacer cumplir la normativa. “No por este accidente podemos opacar a todo el sistema de transporte escolar del país. Es muy grande la cantidad de transportes escolares nuevos, cuyos dueños se han preocupado de cumplir con todas las normas de seguridad”, concluyó.