Un grupo de diez estudiantes de la carrera de Ingeniería en Agronegocios de la Facultad Tecnológica viajó a Costa Rica en el marco de una movilidad estudiantil apoyada por el Departamento de Relaciones Internacionales e Interuniversitarias (DRII). El grupo fue acompañado por el profesor José Luis Llanos Ascencio y su estancia se extendió por 12 días.
Las experiencias internacionales forman parte importante de las actividades que organiza el Departamento de Gestión Agraria, ya que desde hace más de una década realizan uno o dos viajes internacionales al año, con diferentes grupos de estudiantes, para ofrecerles una visión diferente de cómo se desarrollan los Agronegocios en el mundo.
“Esta iniciativa parte el 2012 y, salvo la época de pandemia y estallido social, se ha realizado todos los años. El objetivo principal es mostrar otra realidad productiva, técnica, cultural y comercial, salir de estas cuatro paredes y conocer una mirada distinta”, explicó José Luis Llanos, profesor que viajó junto al grupo de estudiantes, señalando además sobre la Universidad de Costa Rica (la universidad de destino) que “mantenemos contacto permanente con la Escuela de Economía Agrícola y Agronegocios de la UCR, es una gran relación, de años”.
El calendario para el viaje incluyó, en el primer fin de semana, una visita al Parque Nacional Manuel Antonio en la costa pacífico del país. A continuación, durante la semana, el grupo de estudiantes asistió al V Seminario de Economía Agrícola y Agronegocios que organiza la Universidad de Costa Rica, evento que consideró visitas a terreno y a empresas. Luego se trasladaron hacia la costa del Caribe para visitar el Parque Nacional Cahuita y, finalmente, recorrieron la capital San José bajo un enfoque cultural.
Para Felipe Sepúlveda Quezada “es un orgullo tener la oportunidad de ampliar el conocimiento, de forma crítica, y en representación de la carrera y la universidad. En lo personal, soy un convencido de que el sector rural es un motor de crecimiento para el desarrollo del país”.
César Alarcón Durán, en tanto, valoró que “esta es una oportunidad que no se podía desaprovechar, porque la mayoría de nosotros consideraba que no teníamos los medios para hacerlo por cuenta propia y en este caso fuimos seleccionados y apoyados por la universidad”.