Expertos discutieron sobre las causas y el tratamiento de la fibromialgia

Especialistas de la salud debatieron sobre cómo se debe abordar esta enfermedad reumatológica que se caracteriza por dolor crónico generalizado durante más de tres meses y que aqueja entre al 2 y al 5 por ciento de la población. La conversación se realizó en el simposio “Fibromialgia: Una mirada multidisciplinaria”, organizado por la Dirección de Postgrado y Postítulos junto a la Escuela de Medicina, ambas dependientes de la Facultad de Ciencias Médicas.
 

 
Autoridades del Plantel, del Gobierno y del mundo de la salud se dieron cita en el simposio “Fibromialgia: Una mirada multidisciplinaria”, organizado por el Departamento de Postgrado y la Escuela de Medicina de la Facultad de Ciencias Médicas de nuestra Casa de Estudios, donde discutieron las causas y el tratamiento de esta enfermedad crónica que afecta entre el 2 y 5 por ciento de la población.
La fibromialgia es una enfermedad reumatológica que se caracteriza por dolor crónico generalizado por más de tres meses. Las causas son desconocidas, pero hay algunas investigaciones que aseguran que se produciría por una alteración de determinados neurotransmisores del sistema nervioso. El tratamiento actual es sobre la base de fármacos (analgésicos, antiinflamatorios, y antidepresivos), deporte aeróbico y terapia psicológica.
Entre las autoridades presentes, el decano de la Facultad de Ciencias Médicas de la Corporación, Dr. Humberto Guajardo, señaló que la fibromialgia es una enfermedad que preocupa desde hace varios años a profesionales y estudiantes ligados a la salud.
“Para nuestra Facultad es un agrado y un honor recibir a un grupo de profesionales y estudiantes que de alguna manera están interesados en discutir y en trabajar sobre un tema que desde hace muchos años viene preocupando al mundo profesional, especialmente a quienes nos dedicamos a la salud”, expresó la autoridad.
Añadió que el objetivo del simposio era repasar distintas miradas sobre la patología, la que a veces es mirada en menos por los mismos profesionales, dijo. “Creo que es fundamental que hagamos un enfoque interdisciplinario de una patología que de alguna manera está presente, que existe y que necesita que la estudiemos y que nos preocupemos mucho más. Muchas veces está subdiagnosticada y en otras ocasiones no se le está prestando la importancia y la orientación que necesitamos desde nuestra vida profesional”, aseguró.
Por su parte, la jefa del Departamento de Discapacidad y Rehabilitación de la Subsecretaría de Salud Pública del Ministerio de Salud, Dra. Ximena Neculhueque, explicó que la fibromialgia debe ser estudiada desde diferentes ángulos. “Evitar que la profundización de la sintomatología en las personas que poseen y que manifiestan este síndrome, y disminuir las repercusiones que este tiene en sus vidas cotidianas, requiere sin duda un abordaje y una mirada biopsicosocial”, precisó.
En tanto, la abogada regional y representante del nuevo Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, Laura Galaz, aclaró que justamente las mujeres son las más afectadas por esta patología. “La fibromialgia es una enfermedad que no está reconocida y todavía hay muchos estudios en torno de ella, pero lo que está claro es que nos afecta en mayor parte a las mujeres. Entre el 2 y el 5 por ciento de la población la padece y el 90 por ciento son mujeres”, puntualizó.
Exposiciones
Comenzó la ronda de ponencias el reumatólogo y médico internista, Dr. Juan Ignacio Vargas, de 45 años -quien desde los 12 padece la enfermedad- con el tema “Introducción a la fibromialgia o síndrome crónico doloroso familiar”.
Vestido con tenida deportiva relató: “Esta condición, que no muchas veces es una enfermedad, se mejora con ejercicios y eso es lo que hay que hacer, por eso vine con buzo y zapatillas. Sólo pasa a ser una enfermedad cuando se altera la calidad de vida”.
Luego, el académico de la Facultad de Química y Biología del Plantel, Dr. Luis Constandil, expuso el tema “Origen de la fibromialgia: nuevas hipótesis”. Ahí catalogó a la fibromialgia como una “enfermedad invalidante” caracterizada por dolor muscular generalizado de difícil diagnóstico y con un origen que aún permanece desconocido.
Explicó que la principal razón por la cual se desconoce el origen de la enfermedad es la falta de un modelo animal de fibromialgia que permita su estudio en forma detallada. “La hipótesis más reciente propone que los niños que sufren periodos traumáticos en su vida tienden a desarrollar cuadros de dolor crónico como fibromialgia en la juventud, que se manifiestan cuando los individuos son sometidos a estímulos desencadenantes, como períodos de estrés físico o psicológico”, subrayó.
A continuación, el psicólogo Mauricio Gateño presentó la ponencia “Psicoterapia con pacientes con fibromialgia: un reencuentro genuino con tu ser e historia”, donde detalló aspectos personales y biográficos, y su relación de cerca con el estrés y la depresión, y su impacto tanto en lo emocional como en el cuerpo mismo.
“Una acumulación de situaciones interpretadas emocionalmente como traumáticas, genera efectos a corto, mediano y largo plazo en el cuerpo físico. Este punto, es parte esencial de la tranquilidad psíquica del paciente y un elemento básico de su psicoeducación”, sostuvo.
Más adelante, la socióloga y académica de la Facultad de Ciencias Médicas, Dra. Andrea Lizama expuso el tema “Fibromialgia: una mirada biopsicosocial con perspectiva de género”, donde precisó que las cuestiones de género constituyen un asunto de prioridad en el análisis de la trayectoria de las enfermedades, esencialmente las categorizadas como crónicas que se manifiestan mediante dolor y malestares corporales.
Finalmente, la presidenta de la Fundación Fibromialgia en Acción, Mariluz Tobar, -quien además padece la enfermedad- presentó el tema “Desafío de las personas con fibromialgia” donde detalló los objetivos de la entidad que preside. “Uno de nuestros primeros desafíos es realizar un catastro nacional de enfermos de fibromialgia para obtener estadísticas reales de la enfermedad en nuestro país. Con ellas esperamos demostrar la necesidad de realizar políticas públicas reales que incluyan un tratamiento multidisciplinario y el reconocimiento de la enfermedad como invalidante”, concluyó.