El pasado jueves (8) en el Salón de Honor del Plantel, se realizó la ceremonia de cierre de la primera versión del Diplomado en Gestión Pública, mención Crimen Organizado, programa enmarcado en el convenio de colaboración firmado entre la Universidad de Santiago y la Escuela de Gendarmería.
En la ocasión, el Dr. Carlos Yévenes Ortega, director del Departamento de Economía, unidad que aloja el plan de estudios, señaló que, junto con felicitar a las (os) graduadas (os), la jornada sirve para celebrar el trabajo mancomunado entre la academia y una repartición pública que entrega seguridad y rehabilitación al país, siendo “un ejemplo de la excelencia que se puede obtener cuando se forman alianzas entre instituciones de distintas disciplinas”, remarcó.
Uno de los objetivos del plan de estudios fue entregar saberes y herramientas que permitan analizar la realidad del país en esta área, tributando a la formación de agentes de cambio con una mirada estratégica y orientada en derechos humanos. En este se abordaron temas claves en esta materia: gestión pública, liderazgo, negociación, ciudadanía, sistema penitenciario y reinserción social, entre otros.
Valeska Alarcón Madrid, coordinadora ejecutiva del programa de estudios, indicó que en total fueron veintiocho personas las que participaron en la primera versión, siendo dos provenientes de carabineros, una del Ejército y el resto de Gendarmería de distintas áreas: psicología, administración pública, fiscalía, uniformados, etcétera. “Ha sido un arduo trabajo. Me impactó la retroalimentación positiva por parte de las (os) estudiantes”, destacó.
Entre las personas que cursaron el diplomado, se encontraba la directora de la Escuela de Gendarmería, coronel María Angélica Aguirre Cárdenas, quien indicó que esta iniciativa debe servir como ejemplo para que “otras casas de estudios aborden colaborativamente fenómenos que afecten a nuestros ciudadanas y ciudadanos”, asegurando que para la entidad que dirige, los conocimientos facilitados “han sido una enorme oportunidad de aprendizaje y mejora”.
Por su parte, el capitán Francisco Orellana Muñoz dijo que tomó la decisión de inscribirse por las “falencias que muestra el Estado” en esta materia, igualmente “por la necesidad, como funcionario público de capacitarme en temáticas relacionados con el crimen organizado”. A su juicio, la mirada complementaria entre teoría y práctica esto le permitirá “aportar con un grano de arena en el trabajo diario”.
El diplomado se realizó de manera semipresencial y constó de 9 módulos, contemplando un total de 192 horas cronológicas de docencia y 90 horas totales de trabajo autónomo. Quienes lo hayan cursado podrán optar a una articulación con el Magíster en Gerencia y Políticas Públicas de la FAE.