El fundador de la carrera de Administración Pública de nuestro plantel, Pedro Ortega, fue distinguido en la Cámara Alta por su gran aporte al servicio público.
El académico asume su reconocimiento destacándolo como un logro para la Universidad. “Mi meta ha sido tratar de lograr equidad y no podemos conseguir una sociedad en justicia con un Estado mediocre, y éste no estará de pie si hay advenedizos que trabajan sólo por el pan”.
En junio de este año, Pedro Ortega, académico de Gestión y Políticas Públicas de la Facultad de Administración y Economía (FAE), lanzó el libro “Sociedad, Estado y Agentes Públicos”, en el que ofrece una mirada crítica del rol que desempeñan los poderes ejecutivo, legislativo y judicial en la sociedad. Alabado por la crítica, el Senado, presidido por Camilo Escalona, decidió homenajearlo con una ceremonia privada realizada recientemente.En la oportunidad, el presidente de la Cámara Alta destacó que al académico de la FAE es “un hombre que no atesora riquezas económicas, pero que sí es un apóstol del Estado”, pues ha dedicado su vida al servicio público, haciendo clases, investigando y especializándose con una maestría en Racionalización de la Función Pública, impartida por un convenio entre el Gobierno de Chile y Naciones Unidas.Para el académico, este reconocimiento “no es sólo para mí, sino para la Universidad y la carrera que fundé (Administración Pública). Mi meta ha sido tratar de lograr equidad y no podemos conseguir una sociedad en justicia, con un Estado mediocre, y éste no estará de pie si hay advenedizos que trabajan sólo por el pan”.Estado y agentes públicosEl libro “Sociedad, Estado y Agentes Públicos” analiza el rol de los diferentes componentes del Estado en la sociedad. “Éste es regulador, impulsor y debiera tomar las decisiones en todas las funciones que apuntan al desarrollo integral de la sociedad… Si el Estado se queda sólo en lo económico, se crea una sociedad injusta, con concentración de la riqueza”, explica el académico, quien afirma que la administración pública “es una parte del Estado, la más burocrática, pero las decisiones no se toman en esta área… Hay una incultura muy grande que cree que la administración pública es el Estado”.Según el profesor Ortega, para que el agente público aporte a una sociedad más justa es necesario “dejar de lado el egocentrismo. Debe luchar por la equidad en los bienes públicos, ser un aporte de valores, comprender los ideales sociales”, puntualiza.