Orquesta Clásica Usach celebra 170 años de nuestra Universidad con destacadísima pianista como invitada
Era 1811 y Ludwig van Beethoven ya gozaba de la estatura de genio de la música, por lo que se permitía libertades creativas totales. Fue con ese dominio que enfrentó la composición del Concierto n°5, su última obra para piano dedicada al archiduque Rudolf de Austria, quien fuera patrón y alumno del músico alemán.Beethoven decidió entonces que prácticamente la pieza no tuviese introducción orquestal, sino que se iniciara sólo con tres acordes interpretados por todos los instrumentos de la orquesta. Cada uno de ellos seguidos por intervenciones del piano solista, breves pero exigentes.