Bernardo Navarrete, plantea que la dimisión de la ex titular de Vivienda y Urbanismo le genera al mandatario un enorme problema con la UDI, “porque en buena medida ha habido poca capacidad de anticiparse a conflictos por parte del ejecutivo”.Ante la abrupta renuncia de la ahora ex ministra de Vivienda y Urbanismo, Magdalena Matte, “el gran perdedor” con todo este episodio es el presidente Sebastián Piñera. Así lo aseguró el analista político y académico de la Universidad de Santiago de Chile, Bernardo Navarrete, quien sostuvo que el mandatario parece propender a las “crónicas de las muertes anunciadas”, en alusión, también, a la no menos bullada salida de la ex intendenta del Bío Bío, Jacqueline Van Rysselberghe.“Aquí, el gran perdedor es el presidente Sebastián Piñera, por no prever los efectos del caso Kodama sobre la ministra Matte, quien es esposa del senador UDI Hernán Larraín. Renunciar no tiene un efecto sobre su propio partido, pero le genera un enorme problema al propio presidente de la República con la UDI, porque, en buena medida, ha habido poca capacidad del ejecutivo de poder anticiparse a conflictos”.El cientista político Navarrete sostiene que las salidas del gobierno de Van Rysselberghe y Matte no son comparables. “Es el mejor contrapunto entre alguien que quiere proyectar una carrera política, versus alguien que quiere proyectar una consolidación profesional de un trabajo, sin mayores pretensiones políticas”.A juicio del experto de la Facultad de Humanidades de la Usach, el episodio de la renuncia de la ex ministra Magdalena Matte, tendrá consecuencias en la popularidad del presidente Piñera. “Claramente esto va a repercutir en las encuestas. Una vez más el presidente termina salpicado por buenas o malas decisiones en las cuales la capacidad de prospectar conflictos vuelve otra vez a ser un tema relevante”. Para Bernardo Navarrete, “será difícil (para Piñera) explicar por qué sale un ministro técnico que no tenía mayores prensiones políticas, y que tenía apoyo, e incluso afecto en la oposición”.