A juicio del coordinador de la Unidad de Salud Pública y Epidemiología de la Facultad de Ciencias Médicas, doctor Luis Martínez, nuestro país ha trabajado en políticas públicas que inciden en el manejo y control de esta enfermedad, sin embargo falta sensibilizar a la población sobre sus principales características, formas de contagio y prevención.
En el marco del Día Mundial contra la Hepatitis, que se conmemoró el domingo 28 de julio, la Organización Mundial de la Salud instó a los gobiernos a que intensifiquen sus medidas contra la enfermedad, a la que se ha llamado “la epidemia silenciosa”.En opinión del coordinador de la Unidad de Salud Pública y Epidemiología de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago, doctor Luis Martínez, se trata de una medida necesaria ya que “esta enfermedad mata a cientos de millones de personas en el mundo. Sin embargo, no provoca tanto revuelo mediático y preocupación de las autoridades políticas y sanitarias como ocurre con otras enfermedades”.Para el doctor Martínez, es fundamental concientizar o sensibilizar a la población sobre las medidas de prevención de la hepatitis, a través de una campaña de información y de educación sobre las principales características de la enfermedad, modos de transmisión y los mecanismos básicos deprevención del contagio.Dada las diferencias epidemiológicas se debiera enfatizar estas campañas con algunos grupos específicos, considerando que actualmente se conocen cinco tipos de hepatitis A; B;C;D y E”, señala Martínez.El académico recomienda que en el caso de la hepatitis A, que habitualmente se contagia por la contaminación con materia fecal presente en alimentos o en el agua, similar a lo que ocurre con la hepatitis E,“es necesario orientar la campaña a los niños, jóvenes y personas a cargo de niños pequeños. Para la hepatitis By C hay que apuntar la información con el personal de salud y algunos grupos de alto riesgo considerando que ésta se contagia por el contacto de sangre y sus derivados y por mantener relaciones sexuales sin protección”.El experto considera que en Chile son varias las medidas de políticas públicas que inciden en el manejo y control de las Hepatitis, “como el incremento del tratamiento de aguas servidas que surgió tras las epidemia de los `90,la inclusión en los programas de vigilancia epidemiológica como enfermedades de notificación obligatoria, estar sometidas en el caso de la B y la C, a vigilancia de de laboratorio, además que desde el año 2005 los niños reciben la vacuna contra l Hepatitis B a los 2, 4, 6 y 18 meses“, recalca el doctor.Sin embargo, a juicio del doctor Martínez, la debilidad de la política pública está en la falta de campañas permanentes de información y educación sobre estas enfermedades.El académico, considera que en el futuro habrá un declive de la endemia de Hepatitis mientrasque habrá un incremento en los casos de hepatitis B y C. “Esta situación sólo se modificará en la medida que la vacunación contra la Hepatitis B logre su máximo impacto, y en el caso de la C su disminución dependerá de las campañas de prevención y sensibilización que se realicen a la población”, concluye el especialista.