La pianista, cantante y formadora de generaciones de músicos y compositores, protagoniza una nueva edición del ciclo “Grandes Chilenas”, este martes 8 en Radio Universidad de Santiago. De manera inédita, reconoce sus aportes personales en la fundación de la Sociedad Bach y en la Orquesta Sinfónica Infantil, entre otras importantes iniciativas, que hasta ahora sólo se atribuyen de manera exclusiva a su esposo, el compositor y director Jorge Peña Hen. La entrevista in profundis, se retransmite este martes 8, a las 10 y 00 horas a través de la 94.5 FM, 124 AM y www.radiousach.cl.
Un bellísimo piano de media cola gobierna gran parte del espacio en el acogedor departamento de Nella Camarda, ubicado en la comuna de Las Condes. Es el refugio de esta pianista que se rodea de partituras, fotografías, obras visuales y artesanías traídas de Italia.Hija de Juan Camarda Paratore y María Valenza Lamacchia, inmigrantes italianos amantes de la música docta, tiene su primer contacto con el piano a los cuatro años. Con el apoyo de sus padres cursa estudios en el Conservatorio Nacional, donde llega a ser la mejor alumna de su generación y gana un concurso para tocar con la Sinfónica de Chile.“Desde entonces nunca más pensé en dedicarme a otra cosa que no fuera la música, ni en casarme con un hombre que no fuera músico”, señaló en la conversación con la periodista Gabriela Martínez, en el marco del ciclo “Grandes Chilenas”.Tal como lo pensó, Nella une su vida con un hombre con quien comparte el amor por la música clásica. En 1952, contrae matrimonio con Jorge Peña Hen, con quien se establece en Coquimbo y después en La Serena. En la ciudad de las iglesias, realizan un trabajo mancomunado que hace historia, aunque con una valoración aún parcial.“Me siento poco reconocida, es como si todos mis desvelos hubieran quedado ahí”, señala la artista, tras reconocer que colabora de manera activa y no simbólica en la fundación de la Sociedad Bach. En aquella labor debe ser secretaria de acta, integrar la orquesta, dirigir el coro, participar en las giras e incluso recibir a los músicos en su casa, porque no había recursos para hospedarlos en hoteles.“En esa etapa me deberías preguntar qué no hice. Todo era sin dinero, sólo con entusiasmo”, dijo al reconocer que fue uno de los puntales de la Sociedad Bach, instancia cultural que tras catorce años de funcionamiento, consigue el prestigio necesario para dar origen al Conservatorio de Música de La Serena y sustentar el innovador proyecto de Orquesta Sinfónica Infantil, la primera de su tipo en Iberoamérica.Nella rememora con profunda emoción aquella labor cultural tesonera, que encuentra apoyo en ilustres serenenses, como fue el caso Alfonso Castagneto, periodista y director de diversos medios; y Barack Canut de Bon, profesor, poeta y cronista.Su propio legado“Seguir el camino de la música estuvo motivado por una vocación genuina, y en eso, mis padres me apoyaron tremendamente”, planteó la pianista, quien después del asesinato de Jorge Peña Hen, en octubre de 1973, afronta el dolor de la pérdida a través una intensa labor investigativa.Por años, compatibiliza su trabajo como profesora de piano en el Conservatorio de la Universidad de Chile, con la difusión y puesta en valor del legado de su marido, sin referirse nunca a su aporte personal. Por ejemplo, en 2005, traduce al italiano la ópera infantil “La cenicienta”, de Jorge Peña Hen. La obra es presentada en Teatro Malibran de Venecia. En un nuevo dolor para ella, la noticia pasa inadvertida en nuestro país.“El mensaje es para mis nietas, para que se valoren”, señaló a modo de testimonio para su familia y las nuevas generaciones.La entrevista in profundis, se retrasmite este martes 8, a las 10 y 00 horas a través de la 94.5 FM 124 AM y www.radiousach.cl.