Para el Dr. Humberto Guajardo, antes de mejorar un examen como el Eunacom, se debería asegurar que las “acreditaciones de las universidades y escuelas respectivas sean serias y reflejen la realidad”.
Frente a la discusión por el proyecto de ley del Ministerio de Salud que pone fin al Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom), para contratar médicos en el sector público, el decano de la Facultad de Ciencias Médicas de la U. de Santiago, Dr. Humberto Guajardo, consideró que los esfuerzos deben estar concentrados en mejorar el sistema de acreditación de la diferentes escuelas de medicina del país, más que en la rendición o no de este examen.La autoridad señaló que esta prueba, “en cierta medida, se fue desvirtuando. Primero, no mide competencias sino que, fundamentalmente, conocimientos en algunas áreas y, además, algunas universidades comenzaron a utilizarlo como forma de publicitar el resultado que habían conseguido sus egresados en el ranking. Esto se convirtió, a mi juicio, en un mecanismo de marketing”.El Dr. Guajardo acusa que muchas universidades se preocupan de preparar a sus estudiantes de medicina sólo durante el último año, antes de rendir el examen.“Hacen un verdadero preuniversitario del Eunacom y en la práctica eso tiende a desvirtuar la preparación que el estudiante debe tener durante siete años. Eso no me parece razonable desde el punto de vista académico”, señala el doctor Guajardo.Para el decano de la U. de Santiago, las acreditaciones de universidades y escuelas de medicina, así como el Eunacom, se han desprestigiado y no cumplen su objetivo principal de certificación de calidad. Sin embargo, para solucionar este problema, el académico recomienda “ir por partes y comenzar mejorando el proceso de las acreditaciones”.Lo primero que deberíamos hacer es modificar y verificar los mecanismos de acreditación de las universidades y las escuelas de medicina, “asegurarnos que estas acreditaciones sean serias y reflejen la realidad”.“En mi opinión -señala el decano-, si efectivamente tenemos una buena acreditación en la universidad y en la respectiva escuela de medicina, se debiera garantizar que los egresados tienen buena preparación, ahora, si más adelante se quisiera trabajar en verificar las capacidades de los médicos y las competencias que ellos adquieren, no tan sólo se requiere un examen de conocimientos, sino que buscar otros mecanismos para comprobar que los médicos tienen las competencias necesarias”.El académico de la U. de Santiago puntualiza que, una solución real, debería ir en etapas. “Lo primero es asegurarse que la acreditación cumple su objetivo que es asegurar que las escuelas de medicina cumplan los objetivos requeridos por los propios estudiantes y por la sociedad completa”, agrega el Dr. Humberto Guajardo.Por Alex Araya