La Cámara de Diputados aprobó finalmente las indicaciones que aseguran escaños para pueblos originarios, independientes y paridad de género, pasadas las 20.00 horas de este jueves. Ello, luego de que dichas indicaciones fueran rechazadas el miércoles e incluso el jueves, tanto por los Senadores como por la misma Cámara Baja.
Para la Directora de Género, Diversidad y Equidad de la Usach, Andrea Hurtado, los congresistas ya perdieron la oportunidad de dar una señal fuerte de empatía hacia el movimiento social. Respecto al rechazo en primera instancia de parlamentarias oficialistas a la paridad de género, la socióloga y máster en antropología social y política explicó que esta votación “demuestra que ellas mismas viven situaciones no paritarias dentro de sus espacios políticos”.
Por su parte, la doctora en filosofía y académica de la Universidad de Santiago, Dra. Diana Aurenque, consideró que una de las exigencias que se expresan en las calles tras el estallido social es la participación de toda la diversidad de actores que componen la sociedad. “El rechazo le resta legitimidad al Proceso Constituyente, que tiene que ser legítimamente validado por la población. Eso no ocurrirá si no se abren los espacios de participación”, advirtió
El investigador en historia étnica y pensamiento indígena, Dr. Pedro Canales, opinó que la aprobación tras los rechazos en el Congreso revelan la falta de convicción política en estas materias y deja al descubierto el “conformismo” de los parlamentarios con el actual escenario político, considerando que nuevas reglas agregarían incertidumbre a su futuro electoral.
“Mucho del estallido tiene que ver con la exclusión, la marginalidad y el abuso… El Congreso debiera entender que en un nuevo Chile esta exclusión no resiste ningún análisis”, enfatizó el académico del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) de la U. de Santiago.
Finalmente, el historiador y doctor en historia de nuestro Plantel, Dr. Fernando Pairicán, opinó respecto a las posibles razones por las que el oficialismo rechazó la iniciativa en un comienzo. “La derecha se opone porque afecta debates sobre la propiedad en territorio mapuche y en minas del norte”, destacó. “Los escaños reservados no son la conquista que el movimiento indígena espera, pero permitiría avanzar en revertir la segregación de los dirigentes chilenos por los pueblos originarios”, concluyó el investigador en historia del siglo XIX y reciente, enfocada en el pueblo mapuche y su relación con el Estado chileno.