En un trabajo que se extiende por varios años y que involucra a la totalidad del cuerpo académico de este programa, la Carrera de Pedagogía ha logrado mantener altos estándares ligados a la excelencia académica. Prueba de esto es que en su primer proceso de acreditación fue por cuatro años (2006-2010) y en este segundo proceso acreditó por seis.“El proceso de acreditación ya está instalado. No guste o no es una realidad. Hemos ido comprendiendo que los procesos de acreditación revelan o se acercan al estado de funcionamiento de los programas. En ese sentido está bien”, señaló el jefe de carrera de la pedagogía en castellano, Dr. Jorge Rueda.“Nosotros empezamos a trabajar teniendo bien claro qué debíamos mejorar y así fue como en mayo de 2010 comenzamos nuestro proceso de autoevaluación. Sin embargo, nuestro trabajo durante estos cuatro años tuvo en cuenta las recomendaciones del anterior proceso de acreditación, tendientes a mejorar los aspectos deficitarios y que –en parte- estaban relacionados con la poca vinculación que teníamos con el Departamento de Educación”, señaló el Dr. Jorge Rueda, jefe de Carrera de Pedagogía en Castellano del Departamento de Lingüística y Literatura de la Facultad de Humanidades. Y la vinculación con el Departamento de Educación fue central para cumplir con las recomendaciones de la agencia acreditadora, ya que era uno de los puntos débiles expuestos. Pero, la acreditación también pasó “por mantener nuestro trabajo disciplinario y por preocuparnos –aún más- por el área pedagógica. Para eso iniciamos un trabajo mucho más colaborativo entre el departamento de educación y la carrera de pedagogía en castellano”, señala el jefe de carrera Dr. Rueda. Este trabajo colaborativo con el Departamento de Educación se tradujo en la incorporación de expertos de esa unidad académica al Comité de Carrera de Pedagogía en Castellano, ayudando a la fluidez en el trabajo entre ambas unidades. “El Comité de Carrera revisa, ve los programas de estudios y así lo hizo en estos cuatros años en función de algunas sugerencias de los estudiantes y de la contingencia. Estamos constantemente abiertos a la optimización del proyecto de la carrera y como eso se refleja en la práctica”, enfatizó el Dr. Rueda. Fueron estas buenas prácticas, instaladas dentro de Pedagogía en Castellano las que han logrado que actualmente este programa se apronte a recibir a los futuros estudiantes teniendo la certeza que –entre otros beneficios- podrán acceder a la Beca Vocación de Profesor.“Con esta acreditación por seis años los estudiantes podrán tener la certeza que el beneficio de la Beca cubrirá la totalidad de sus estudios”, señaló el Dr. Rueda. Para finalizar, el Dr. Rueda señaló con respecto al debate que genera los procesos de acreditación universitaria que “ya está instalado. No guste o no es una realidad. Hemos ido comprendiendo que los procesos de acreditación revelan o se acercan al estado de funcionamiento de los programas. En ese sentido está bien”.