Hoy nuestra Casa de Estudios celebra sus 170 años en el Aula Magna a las 11:30 horas:

Universidad de Santiago impacta a través de tres siglos al desarrollo del país creando y transfiriendo conocimiento

Fundada en 1849 como Escuela de Artes y Oficios, nuestra Institución se comprometió con los desafíos de modernización de Chile y su industrialización. Ya en 1947, pasó a ser la Universidad Técnica del Estado, momento en que generó conocimiento diverso y pertinente en el campo de la informática, los desafíos energéticos y la divulgación científica. Desde 1981, como Universidad de Santiago de Chile, no solo ha mantenido su rol estatal y público, además de su vocación social. También ha logrado formar profesionales de excelencia con vocación de servicio al país; crear y transferir investigación de frontera; y mantenerse como un referente absoluto a nivel nacional en temas de conocimiento, ciencia, tecnología e innovación.
Desde el siglo XIX hasta el siglo XXI, la Universidad ha dedicado sus esfuerzos a la formación académica, la generación de tecnologías y el desarrollo de la ciencia e innovación, lo que la ha posicionado como un actor clave para el país en su calidad de institución de excelencia.

Este jueves, desde las 11:30 horas, la Universidad de Santiago de Chile realizará en el Aula Magna su tradicional ceremonia para celebrar, este 2019, sus 170 años desde la creación de la Escuela de Artes y Oficios (EAO). Dicha Institución, inaugurada en 1849, constituyó los cimientos de nuestra Casa de Estudios Superiores. En la conmemoración, se entregará un reconocimiento a los funcionarios y administrativos que cumplen 10, 20, 30 y 40 años de servicio.

Desde el siglo XIX hasta el siglo XXI, la Universidad ha dedicado sus esfuerzos a la formación académica, la generación de tecnologías y el desarrollo de la ciencia e innovación, lo que la ha posicionado como un actor clave para el país en su calidad de institución de excelencia, más allá de los rankings que la avalan como la tercera a nivel nacional y la segunda mejor estatal de Chile (https://www.usach.cl/news/u-santiago-mejora-su-posicion-ranking-qs-y-la-tercera-nivel-nacional).

Orígenes

La Escuela de Artes y Oficios constituyó uno de los primeros antecedentes de la educación técnico-profesional del país. El objetivo de su creación fue modernizar a Chile en base a la tecnología, dotarlo de  especialistas y dar movilidad social a través de la educación de las clases populares. Así, por ejemplo, fueron jóvenes formados por la EAO quienes mantenían y reparaban locomotoras durante la naciente expansión del ferrocarril.

Posteriormente, el proyecto universitario se expande y se consolida con la creación, en 1947, de la Universidad Técnica del Estado (UTE), que continuó e intensificó su aporte al desarrollo de la industria nacional. En 1964, a través del Instituto de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Antofagasta, se dio inicio a la experimentación de placas solares, para que las empresas contaran con energías renovables y de bajo costo. Durante este periodo, también destacó la construcción de ocho sedes regionales desde Antofagasta hasta Magallanes.

Historia reciente

En 1985, la Universidad de Santiago fue la primera institución en Chile en recibir un correo electrónico, lo que marcó un hito informático en el país. Este momento se había gestado décadas atrás, cuando adquirió el segundo computador que llegaba a tierras nacionales, el ‘Datatron’, lo que significó un impulso a las ciencias de la computación. Durante las últimas décadas del siglo pasado, también se inauguró Planetario, importante centro de divulgación del conocimiento científico.

Ya en el siglo XXI, la Universidad de Santiago se ha comprometido en la formación de profesionales que atiendan a las necesidades del país en el futuro, a través de proyectos como Ingeniería 2030, Ciencia 2030 y otros de innovación educativa e internacionalización. Ello, sin dejar de lado el compromiso institucional con la inclusión: la Casa de Estudios mantiene un trabajo continuo con su programa Propedéutico, hito que impulsó la política pública de acceso a la educación superior.

La Usach ha insistido en la creación de centros multidisciplinarios para abordar de manera integral los problemáticas actuales. El Centro de Innovación en Tecnologías de la Información para Aplicaciones Sociales (CITIAPS), por ejemplo, desarrolla softwares para mejorar la calidad de vida de las personas, combinando ingeniería informática y ciencias del comportamiento humano. El Centro para el Desarrollo de la Nanociencia y la Nanotecnología (CEDENNA), por su parte, realiza investigación en diversos áreas como salud, envases para alimentos, minería y medioambiente. El Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de Alimentos (CECTA), en tanto, ha buscado incidir en las políticas públicas relacionadas a la alimentación desde distintas aristas; y el Centro del Litio es otra apuesta interdisciplinaria para generar valor agregado a la exportación de minerales. 

Finalmente, destacan estudios sobre el clima que se nutren de tres estaciones ubicadas en puntos estratégicos, incluida la Antártica; y proyectos desarrollados por investigadores de distintas áreas, los que han permitido abordar la crisis hídrica del planeta con propuestas para, por ejemplo, desalinizar el agua con energía solar. En el ámbito de las Humanidades, dos premios nacionales han representado a la Usach ante el país: en Periodismo (Sergio Campos) y en Historia (Julio Pinto).

Autor: 
Cristóbal Miranda Ríos
Fotografía: 
Archivo Departamento de Comunicaciones