La actividad, patrocinada por la Federación de Estudiantes y la Vicerrectoría de Apoyo al Estudiante del Plantel, contó con la participación del encargado de negocios de Siria en Chile, Khalil Bitar y del vicario general de la Iglesia Ortodoxa del país de Oriente Medio, George Abed. Los personeros sirios pasaron revista a la crítica situación que se vive en la zona y responsabilizaron “a la intervención extranjera” por el clima de violencia y terrorismo.
Este miércoles (6), en el Salón de Honor de la U. de Santiago, tuvo lugar el foro organizado por el Centro de Estudiantes de Ingeniería Comercial, “Siria, la esperanza sigue en el corazón”, actividad que contó con la participación ilustre del encargado de negocios de Siria en Chile, Khalil Bitar y el vicario general de la Iglesia Ortodoxa, padre George Abed.El encuentro, patrocinado por la Federación de Estudiantes y la Vicerrectoría de Apoyo al Estudiante de esta Casa de Estudios, concitó una alta asistencia juvenil y tuvo como objetivo central dar a conocer la historia y la actual situación de conflicto que vive el país de Oriente Medio, junto con permitir a los estudiantes interactuar con los representantes invitados.El vicerrector de Apoyo al Estudiante, Manuel Arrieta, en representación del rector Juan Manuel Zolezzi, dirigió unas palabras a los asistentes y señaló que, para esta Casa de Estudios “es muy importante que los jóvenes se interesen por conocer qué esta pasando en el mundo y luego puedan decidir cómo contribuir a mejorar situaciones como la de países que están sufriendo”.Durante la charla, el padre George Abed, realizó un repaso por la historia de Siria, mientras que Khalil Bitar expuso sobre la situación actual de conflicto interno en el país árabe, presidido por Bashar al-Assad.Luego de la actividad, el encargado de negocios de Siria en Chile, valoró la instancia surgida a partir de la inquietud de los estudiantes y agradeció a las autoridades por permitir este encuentro.“Me parece excelente que los estudiantes de la Universidad de Santiago se interesen en temas como éstos. A nosotros nos da la oportunidad de hablar sobre una realidad que no pasa por los medios de comunicación que más parecen ser de ‘desinformación’ como son algunos canales de televisión internacional”, manifestó Khalil Bitar.Por su parte, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, Takuri Tapia, sostuvo que la idea de desarrollar este foro surgió del Centro de Estudiantes de Ingeniería Comercial “y, a través de las vocalías de eventos y de cultura hemos querido apoyar, con el objetivo de que el estudiante se informe de lo que está ocurriendo a nivel internacional”.“Lo que buscamos con este tipo de acciones es que los jóvenes se formen su propia impresión. Hoy se dio un buen debate sobre la primavera árabe y la situación de Siria lo que da pie a acciones colectivas que pueden tomar los estudiantes al respecto. Nuestra intención es continuar realizando actividad como la de hoy”, puntualizó el presidente de la federación estudiantil.“Siria bajo la violencia y la injerencia”En su exposición dentro del foro titulado “Siria, la esperanza sigue en el corazón”, el encargado de negocios de Siria en Chile, Khalil Bitar, explicó la situación de violencia que se vive hoy en día en la República Árabe y apuntó al gobierno de Estados Unidos y sus aliados en Europa como responsables de intervenir en el conflicto, alimentando la violencia de grupos terroristas.“Lo peor de todo –señaló Bitar– es que países que lanzaron guerras devastadoras bajo el pretexto de la lucha contra el terrorismo, son los mismos que apoyan el terrorismo en Siria”.“Yo menciono a Estados Unidos que fue a Afganistán para luchar en contra de los talibanes y Al Qaeda y que invadió Irak; y a Francia, que hace cuatro o cinco meses envió tropas militares para luchar en Mali contra el mismo grupo terrorista que ellos apoyan en Siria”, sostuvo el representante extranjero.Por último, Khalil Bitar, acusó a “algunos regímenes árabes que han puesto sus gigantes maquinarias de prensa para falsificar la realidad y transformar en un infierno la vida de los sirios, conocidos por su fraternidad y espíritu de reconciliación”.