El investigador del Departamento de Ingeniería Mecánica, Dr. Diego Vasco, estudia las propiedades de un compuesto orgánico similar a la parafina, que podría utilizarse como material térmico o aislante en el ámbito de la construcción.
La eficiencia energética en las construcciones es un tema relevante por estos días, pues los beneficios que conlleva la buena aplicación de la energía, tanto en vivienda como en edificaciones, no sólo son monetarios. De acuerdo a datos de la Secretaría Ejecutiva de Construcción Sustentable del Ministerio de Vivienda, el 40 por ciento de la energía mundial se consume en los inmuebles.Ante este panorama, el proyecto del Dr. Diego Vasco, académico de Ingeniería Mecánica, apunta precisamente a la implementación de los resultados de sus estudios doctorales, en temas térmicos como el mejoramiento de la envolvente de los espacios habitacionales.El Fondecyt de Iniciación “Estudio experimental y computacional de una envolvente térmica con materiales orgánicos de cambio de fase modificados con nanopartículas”, cuenta con dos fases. La primera es experimental y tiene por objetivo realizar la caracterización de las propiedades termofísicas del material de cambio de fase bajo diversas condiciones.En segunda instancia, está la fase numérica que consiste en que los resultados de las propiedades de este material, serán usados en códigos en un software CFD específico que entrega resultados de cómo se comportaría dicho material bajo ciertas condiciones, alteradas artificialmente bajo experimentación, concretadas en la primera fase.El Dr. Vasco señala que la idea del proyecto surgió de lecturas realizadas en congresos a los que asistió, pero que principalmente guarda relación con su tesis doctoral, en la cual trabajó con el tema de cambio de fase de fluidos no-Newtonianos, es decir, los procesos de solidificación y/o fusión.En cuanto al objetivo principal de la investigación, asegura que busca “mejorar las propiedades termofísicas del material del cambio de fase, para utilizarlo en envolventes térmicas que se usan en material constructivo. De esta forma, se puede usar como parte del material aislante de una casa o edificio”.“La idea es que lo que desarrollemos sea un real aporte en la eficiencia energética. Esto, para que se produzca un confort térmico, lo que significa que las personas que viven en un lugar determinado pueda tener una sensación térmica agradable todo el año. Se traduce también en la disminución de costos asociados a equipos de aire acondicionado y calefacciones’’, agrega.El proyecto, que incluye a tesistas de la Universidad de Santiago de Chile, es importante para el académico no sólo porque se genera conocimiento, sino también porque “busca dar solución a un problema real, como lo es la eficiencia energética en las construcciones de hoy, lo que se traduce en un aporte concreto a la comunidad reduciendo costos monetarios por el consumo. Además, aporta a la protección del medio ambiente, al reducir las emisiones de carbono y material particulado”, finaliza.