El Dr. Juan Manuel Zolezzi remarca que durante este tercer período se reforzará la posición de privilegio alcanzado por el Plantel, como una de las “universidades más importantes del país”. En otro orden, advierte que estará atento a “exigir que el programa de la presidenta Bachelet se cumpla”, puesto que nuestra Institución “es la que se identifica con la inclusión y la movilidad social. El trato preferente con las universidades del Estado, debe hacerse realidad en estos años”.
Tal vez, uno de los mayores retos que asume en este nuevo periodo, es la entrega de una concesión de televisión digital para la Universidad. En este caso, sería al alero de “otra institución estatal que tenga televisión”.
Zolezzi destacó, además, el proceso “ejemplar” que se vivió en la elección de este martes (8), al tiempo que mostró su complacencia ante los resultados: “Es una alegría y a la vez un gran compromiso constatar que la gente ha reconocido el trabajo que se ha hecho en pro de la Universidad”.
El rostro del recién reelecto rector de la Universidad de Santiago, Juan Manuel Zolezzi, era sereno a menos de 24 horas de haber vivido la jornada electoral que le entregó la máxima representación del Plantel para un nuevo periodo, con un 60,7 por ciento de las preferencias. Y es que como reconoció “lo que ocurrió fue ejemplar, sobre todo desde el punto de vista de la participación”, que superó el 90 por ciento. También lo tenía tranquilo el hecho que este proceso electoral, se haya desarrollado en medio de la visita de los acreditadores de la CNA, porque “pudieron ver in situ cómo se comporta nuestra comunidad en estas instancias de participación democrática”. Un capuccino acompaña la conversación, mientras ojea el informe de prensa que se encuentra sobre su escritorio y en el que se repiten las menciones a su reelección. “Es una alegría constatar que, efectivamente, la gente ha reconocido el trabajo que se ha hecho; Somos creíbles y creo que eso inclinó la balanza”, reflexiona. Y sabiendo que la tarea debe continuar, su expresión de tranquilidad puede explicarse porque, según reconoce, “sentí permanentemente el apoyo de estudiantes, funcionarios y profesionales durante todo este camino que desarrollamos; ellos también deben sumarse al trabajo que nos queda por delante”. Desafíos para el tercer período El próximo 17 de agosto el rector Zolezzi asume un nuevo período al mando de la U. de Santiago y adelanta cuáles serán algunas de las principales tareas. “El desafío más grande de esta Universidad, es consolidarse como un Plantel de jerarquía, mediante la calidad, la excelencia y apoyada en buenos indicadores. Queremos reforzar nuestra permanencia dentro de las universidades más significativas del país”. Este nuevo mandato lo proyecta, asimismo, con una acreditación “que sea óptima”, reconociendo que la actual ya es buena. Pero además, plantea que “la Universidad necesita internacionalizarse y atender las dos grandes debilidades que tenemos: la infraestructura física - no de equipamientos - y también la cohesión de los integrantes del Plantel”. Este último elemento toma fuerza, justo ahora que termina la campaña, período en el que hubo algunos dichos que, a juicio del rector, afectaron la cohesión. Quizás uno de los mayores retos que el Dr. Zolezzi se plantea para este tercer período, tiene que ver con un anhelo de hace décadas y que estuvo a punto de ver la luz a principio de los años ’70. Así, el rector Zolezzi adelanta que “la Universidad tiene que tener televisión en este período. Y lo hemos planteado como parte de los compromisos de nuestro programa”. “La Universidad tiene que pedir una concesión de televisión digital, sin lugar a dudas. Pero, independientemente de pedir esa licencia, habría que hacer las gestiones necesarias para ver si podemos ir en alianza con alguna otra institución estatal que tenga televisión, por ejemplo, Televisión Nacional. En ese sentido, la posibilidad de poder colaborar con ellos, me parece interesante”, advierte con un marcado entusiasmo. Relación con el gobierno El teléfono celular, no ha parado de sonar durante el transcurso de la conversación, hasta que decide contestar uno de los llamados. Al otro lado de la línea, lo saluda uno de sus pares del Cruch. Justamente eso da pie para que anuncie que se repostulará a la vicepresidencia ejecutiva de dicha instancia, porque “hemos hecho muchas acciones importantes con el Cruch y esperamos seguir haciéndolas”, adelanta. El Consejo de Rectores permite la reelección por un período de su Vicepresidente Ejecutivo y Zolezzi se siente preparado para ese desafío también. Lo justifica en que “es importante el diálogo que el Cruch pueda tener con el Ejecutivo, que hasta el momento no ha sido mucho, pero no ha sido por culpa nuestra. Simplemente el ejecutivo no nos ha consultado respecto de ningún proyecto de ley de educación y creo que algo hemos tenido que ver en el tema en los últimos años”, reclama abiertamente.Y continúa planteando que no se trata de tener la verdad o “la solución, pero mientras más mentes estén mirando esta coyuntura, es posible construir una mejor solución”, dice Zolezzi. Desde esa misma postura de colaboración, se plantea los cuatro años venideros al mando de la Universidad de Santiago: “Nuestra relación debe ser desde la colaboración entre una institución del Estado y un Gobierno, pero me dolería que el tema de la educación superior pública se empiece a atrasar, como ya lo está y no se vean acciones concretas que favorezcan este fortalecimiento de la educación pública. Obviamente vamos a ser los primeros en señalarlo, con toda la claridad y dureza que corresponda. Vamos a exigir que el programa de la Presidenta Bachelet se cumpla”. “Aspiramos a que se haga realidad en estos años, el trato preferente para con nuestras universidades; es lo que está comprometido con la ciudadanía y nosotros somos parte de ella y, más aún, somos actores relevantes. Además, se nos identifica con la inclusión y con la movilidad social; en consecuencia, si en esta universidad no se fortalece la educación pública, la pregunta que me hago es dónde… Pero, estamos esperando”, reflexiona con cierto grado de esperanza. Respeto a la institucionalidad Finalmente el rector Juan Manuel Zolezzi se refiere al trato que habrá en lo sucesivo con los estudiantes de la Corporación, estamento con el que reconoce tener “en general, una muy buena relación”. Con la Federación se trabaja desde una lógica de colaboración, asegura la autoridad, ya que “la Universidad les da todo el respaldo para que realicen sus actividades, por lo tanto, desde el punto de vista operativo, todo sigue igual. Es probable que desde el punto de vista conceptual, ideológico, filosófico tengamos diferencias, y es natural que así sea”, dice respecto de públicas demandas hechas por los dirigentes de la Feusach, en orden a lograr mayor participación. “Yo estoy por respetar la institucionalidad vigente y por ello tengo que luchar por el Estatuto que está en el Ministerio. Ahora, si a ellos no les gusta eso, no puedo hacer más. Esa institucionalidad fue votada por ellos mismos”, asegura, refiriéndose al Estatuto Orgánico que entrega participación en ciertas instancias a la comunidad universitaria y que fue plebiscitado el año 2008 y entregado a todas y todos los ministros de educación que han ejercido hasta hoy, para lograr su promulgación. Esa es, por ahora, la única manera de derogar el tan cuestionado DFL 149. “Es una atribución exclusiva del gobierno, a través del Ministerio de Educación. No de la Universidad”, asegura Zolezzi y añade: “Mientras yo sea rector y no tenga una propuesta distinta a la vista, tengo la obligación de tratar de lograr, lo antes posible, que ese estatuto pase del Ministerio de Educación, para que vaya a la Secretaría General de Gobierno y, de ahí, la presidenta lo mande a trámite legislativo al parlamento”. Por ahora, la otra esperanza que plantea Zolezzi en este plano, es que junto con la creación de las dos nuevas universidades estatales regionales, se logre la actualización de nuestro Estatuto. La agenda en su tablet anuncia reuniones ligadas a la Acreditación Institucional y los documentos por revisar, esperan en el escritorio. “Mi segundo período como rector aún no termina y hay mucho por hacer”, comenta, mientras la da el último sorbo a su capuccino que queda frío y a medio consumir en su escritorio.