“La participación en los programas de perfeccionamiento docente es mayor a la que se observa en otras entidades de educación superior, pero lo que nos satisface de ello es el compromiso de nuestros docentes con los estudiantes y con el fortalecimiento continuo de su labor pedagógica”, enfatizó la Vicerrectora Académica, Dra. Patricia Pallavicini Magnere, al evaluar el término del diplomado en Docencia Universitaria y el de Investigación e Innovación en Docencia Universitaria, en los que participaron setenta académicos.
En la ceremonia desarrollada en el Salón de Honor de nuestra Universidad, 70 estudiantes recibieron sus diplomas: 51 en Docencia Universitaria y 19 en Investigación e Innovación en Docencia Universitaria.La Vicerrectora Académica, Dra. Patricia Pallavicini Magnere, entregó las primeras palabras de bienvenida en la ceremonia de entrega del diplomado en Docencia Universitaria y el de Investigación e Innovación en Docencia Universitaria, actividad en la que también estuvieron presentes la Directora de la Unidad de Innovación Educativa, Doctora Lucía Valencia Castañeda, y el Director de Pregrado, Doctor Máximo González Sasso.Potenciar el trabajo entre los académicos como también la interacción entre ellos, entregar una herramienta crítica, la adecuación a los cambios, y poder trasmitir a los alumnos una adecuada enseñanza, son los principales aspectos a los que se orienta dichos diplomados que se desarrolla desde el 2009. La Dra. Pallavicini indicó que “la participación en los programas de perfeccionamiento docente es mayor a la que se observa en otras entidades de educación superior, pero lo que nos satisface de ello es el compromiso de nuestros docentes con los estudiantes y con el fortalecimiento continuo de su labor pedagógica. Además, estos programas potencian el trabajo colaborativo entre los profesores al permitirles interactuar y compartir sus experiencias con profesores de las distintas carreras". Se trata de “experiencias de formación consolidadas y permanentemente evaluadas, lo que precisamente ha permitido la reformulación de uno de estos programas, el Diplomado en Docencia Universitaria, cuya extensión y contenidos han sido revisados recogiendo la visión de los mismos participantes".Por su parte, la Doctora Lucia Valencia Castañeda, expresó que “el diplomado ha dejado de ser un mero trámite o una exigencia para poder estar trabajando en la universidad, porque se entrega una herramienta crítica para las tareas que se asignan a los estudiantes. Lo anterior, se ve plasmado en los cambios e innovaciones que hemos hecho en los diplomados”.Además, comentó que “lo más destacado de los programas es que se coloca una nueva perspectiva de la docencia universitaria al adecuarse a los cambios, a las características que tienen los estudiantes actualmente, que en muchos casos no tienen el capital cultural como tampoco todas las conductas de entrada que tenían los universitarios hace 20 años atrás”.La Doctora Valencia finalmente comentó que “la universidad ha significado un mayor acceso, y para los profesores hoy es un mayor desafío hacer clases, porque ya no basta con que sepa mucho de la disciplina de la cual es especialista, sino que tiene que saber enseñar, puesto que una cosa es que se entienda un tema y otra es poder enseñarlo adecuadamente, ese es el desafío de este diplomado”.