Dra. Carolina Aliaga Vidal, directora Dicyt: “Quiero que mi sello sea el apoyo a investigadoras e investigadores por igual”

La doctora en Química asumió en agosto de 2022 la Dirección de Investigación Científica y Tecnológica (Dicyt) de nuestra Universidad. En este rol, busca orientar nuevas políticas para estimular el desarrollo de la investigación en el Plantel.

La Dra. Carolina Aliaga Vidal es profesora de Química y Ciencias Naturales por la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación; magíster en Química por la Universidad de Chile y doctora en Química por ese mismo Plantel. Ingresó a la Usach en 2005, luego de permanecer cinco años en Canadá realizando un postdoctorado en la Universidad de Ottawa y trabajar como investigadora asociada en esa institución.
Como académica de la Facultad de Química y Biología, se ha dedicado a formar estudiantes de licenciatura, magíster y doctorado, además de futuras/os investigadoras/es. Ha desarrollado continuamente proyectos del Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondecyt), actividad que la llevó en 2009 a formar parte de los grupos de estudio de química para ese concurso de financiamiento y, en 2014 al Fondo de Equipamiento Científico y Tecnológico (Fondequip), que había sido inaugurado un año antes y donde pudo contribuir para fundar las bases del sistema de adjudicaciones de equipamiento para la investigación nacional.
Desde agosto del año pasado, la Dra. Carolina Aliaga asumió la Dirección de Investigación Científica y Tecnológica (Dicyt) de la Usach, primer puesto directivo que ocupa al interior de nuestro Plantel. Ha mantenido una agenda ajustada, sin embargo, pudo conmemorar el 8M junto a investigadoras y al equipo administrativo de la Vicerrectoría de Investigación, Innovación y Creación, en un encuentro donde varias colegas compartieron sus experiencias y declamaron su apoyo para que más investigadoras puedan desarrollar su labor. Tras eso, la Dra. Aliaga abrió su calendario para conversar y dar a conocer sus puntos de vista en Usach al Día.
“Tengo el orgullo de haber sido formada por científicas y científicos muy relevantes en el contexto nacional e internacional. Son referentes todas ellas y ellos”, comenta con entusiasmo agregando que el recorrido para convertirse en científica ha sido muy satisfactorio, “porque me ha permitido desarrollarme profesionalmente, siempre acompañada y supervisada en las primeras etapas. Luego, eso me dio un impulso y desarrollé un currículum muy bueno con el que tuve la oportunidad de insertarme en esta Institución como académica, lo que también es un orgullo”, señala.
Sin embargo, reconoce que hubo obstáculos que debió sortear para convertirse en una reconocida investigadora y, si bien estos fueron muchos, era tan grande su impulso por aprender, por entender y por desarrollar ciencia, que no reparó en todas las barreras y dificultades. “Vas sorteando el devenir por cumplir el rol femenino dentro de la sociedad. Afortunadamente hoy hay medidas con perspectiva de género para las investigadoras”, sostiene recordando que durante mucho tiempo para las científicas el camino fue difícil, por la demanda de energía y dedicación, y se veían, por ejemplo, en la necesidad de renunciar y/o postergar la maternidad.
¿Cómo apoyar a las mujeres en ciencia?
Para la Dra. Aliaga, es fundamental crear más masa crítica. “Esto es lo único que va a llevar a aumentar el número de mujeres científicas. Soy una convencida que es un tema de formación, educación y visión, las que deben ser equitativas, formando desde las primeras etapas de la vida por igual”, indica.
“La equidad de la educación, y cómo se hace esta dentro del aula, va desde el prekínder, desde los primeros años, ya que hombres y mujeres deben ser tratados por igual en el acceso al interés por la formación”, continúa. “Hay estudios que afirman que los profesores y profesoras, cuando hacen matemáticas, miran por más tiempo a los hombres que a las mujeres. Esos detalles van alimentando la discriminación en el área formativa científica”, dice.
La doctora en Química asegura que, si bien celebran el aumento de las tasas de ingreso de mujeres a las ciencias, cabe preguntarse cómo ellas terminan las carreras. “Ahí es donde empiezan a producirse las diferencias, porque las mujeres tenemos que comenzar a asumir otros roles justamente en esta etapa formativa profesional. Es la etapa donde la mujer debe asumir roles de cuidado”, manifiesta.
En la medida que los hombres asuman instancias de cuidado, el panorama puede cambiar, porque “las mujeres sabemos que, si queremos formar una familia o tener hijas/os, nuestras carreras serán más débiles”.
En esa línea, añade que es la sociedad la que debe decidir si quiere tener el talento femenino a disposición del desarrollo de la ciencia o no, porque al dejar sólo al género femenino el tema de los cuidados, se pierde la capacidad laboral de las mujeres. “De acuerdo con nuestras estadísticas, la Usach cuenta con un 27% de investigadoras activas, versus un 73% de hombres. Estamos con un déficit de un 23% de talento fuera de carrera. ¿Qué está pasando con ese porcentaje? Es algo en lo que debemos trabajar”, insiste.
“Esta no es una competencia por ser más; es solo acceso a la igualdad, ni más ni menos. Y más allá de incentivar a las mujeres a seguir la ciencia, hay que enseñar a los hombres a asumir sus roles”, sentencia la directora de la Dicyt. 
Trabajo y apoyo
La Dra. Aliaga reconoce que, al aceptar el cargo de directora, tenía la intención de dedicar tiempo compartido al trabajo en la Dirección y al de su laboratorio de investigación, pero no ha funcionado así. No obstante, asegura contar con un gran equipo que la apoya desde que comenzó este desafío. 
“Claramente extraño dedicarle tiempo completo a mi trabajo en el laboratorio, pero este cargo es muy atractivo. Estoy en esta Universidad desde hace 16 años y, como investigadora, conozco bien el accionar. Esta vez tengo la oportunidad de estar tomando decisiones para mejorar todo aquello que siempre quise” remarca.
La investigadora subraya que la oportunidad de impactar a una comunidad “siempre será más atractiva y espero hacerlo de forma positiva (…) Hemos tomado acciones para que los fabulosos equipos de investigadoras e investigadores que tiene la Usach se luzcan, tengan más apoyo y se desarrollen”.
“Me estaba yendo muy bien como científica, sigo teniendo el reconocimiento nacional e internacional, pero la opción de impactar una comunidad como la de la Universidad de Santiago, es tanto más atractiva, porque soy la más feliz cuando las investigadoras e investigadores publican, comunican, crean redes y relevan el nombre de este Plantel. Conozco eso y me siento afortunada de tener la posibilidad de crear más políticas en apoyo a esas acciones desde la Dicyt”, confiesa.
Hasta ahora, la académica evalúa gratamente la experiencia como directora, ya que, además, destaca que el equipo humano que la acompaña es muy experto. “Son personas que conocen muy bien su trabajo, entonces yo vengo a aportar conociendo las necesidades de las/os investigadoras/es. En el equipo, sabemos hacer todo, así que la idea se implementa rápido y se gestiona. Y si bien estoy con una alta demanda de trabajo, lo hago con mucho gusto”, resalta.
Por último, la Dra. Aliaga se refirió al sello que busca imprimir a su gestión. “Quiero que mi sello sea el apoyo a investigadoras e investigadores por igual. Nuestra idea es crear instrumentos con perspectiva de género, implementarlos prontamente, apoyar a investigadoras e investigadores por igual, la creatividad de nuevos proyectos estratégicos, que se luzca la productividad, que esta sea más eficiente también, porque el presupuesto siempre es acotado y el objetivo es ser más eficientes”, concluye.

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