Goku y los números del idioma japonés

Columna de opinión de las académicas del Departamento de Lingüística y Literatura de la Facultad de Humanidades, Dra. Raquel Rubio Martín y Riko lizumi.
Los kanji tienen dos lecturas o maneras de pronunciarse. Una llamada onyomi, que proviene de la pronunciación del kanji en chino y, otra llamada kunyomi, que es la lectura para referirse a palabras japonesas. E incluso, a veces, los kanjis pueden tener más de una lectura onyomi y kunyomi.

El 9 de mayo, para sorpresa de su creador, Akira Toriyama, fue celebrado por los fans de la serie Dragon Ball de todo el mundo el de día de Goku, protagonista de esta serie de anime y manga japonés.

La conmemoración de este día es oficial desde el año 2015, coincidiendo con el estreno de la película, Dragon Ball Z: La Resurrección de Freezer y el anuncio de la nueva serie anime llamada, Dragon Ball Super. Todo ello después de que la productora de la serie, Toei Animation,  ante el éxito alcanzado, realizase una solicitud a la Asociación de Aniversarios de Japón para que se reconociera este día como el día Goku, la cual fue aceptada.

Ahora bien, ¿por qué el día 5 de mayo? ¿Tendrá relación con algún acontecimiento de la historia de la serie? En principio parece que no, aunque ese día en la serie se celebra el Día de Piccolo, el Rey Demonio Piccolo, que ese día se declara gobernante de la Tierra y después es derrotado por Goku. En cualquier caso, la razón de esta fecha se debe a que en japonés el número 5 se dice: “Go” y el número 9 se dice: “ ku”, que al unirse precisamente forman la palabra, “Goku”.  Es más, actualmente la franquicia japonesa extiende la celebración a los días 8 de mayo, “gohan”, 5 (go) y 8 (han), y el 10 de mayo, "goten", 5 (go) y 10 (ten del inglés), correspondientes en la serie al nombre del primer y segundo hijo de Goku.

Este juego de palabras que se da entre la pronunciación del nombre de Goku y la pronunciación de los números 5 y 8 en japonés, es una práctica recurrente de la lengua japonesa, donde existen un gran número de palabras homófonas, es decir, que suena igual pero se escriben de manera diferente, y por tanto, remiten a significados distintos. En parte esto se debe a la presencia de más de una grafía para escribir en japonés, donde como saben se utiliza la grafía del kanji, y de los silabarios kana: hiragana y katakana. Así, si buscamos la escritura del nombre de nuestro protagonista, Goku, en kanji sería, 悟空 : 悟 (go) y 空 (ku) diferente a como se escriben los números 5 y 9 en kanji: 五(go) y 九 ku).

Por otra parte, la gente que ya ha estudiado un poco de japonés podría decir que el número 9 se dice, “kyuu”, entonces por qué aquí es "ku". Y es que los kanji, las letras de origen chino adaptadas por los japoneses para escribir su lengua, pueden leerse de varias formas. El origen del uso del kanji se remonta a los siglos V y VI, cuando Japón aún no contaba con un sistema de escritura. El contacto con los sabios chinos que llegaron y escribían con los kanjis llevó a los japoneses a adoptar esta grafía para transcribir su lengua. De esto modo, tomaron la pronunciación de un kanji en chino, por ejemplo, 山 (san) para transcribir este sonido en su lengua. Asimismo, tomaron el significado del mismo kanji, montaña, para escribir la palabra japonesa que significa montaña, (yama), dando como resultado dos formas de pronunciar el mismo kanji.

En consecuencia, los kanji tienen dos lecturas o maneras de pronunciarse. Una llamada onyomi, que proviene de la pronunciación del kanji en chino y, otra llamada kunyomi, que es la lectura para referirse a palabras japonesas. E incluso, a veces, los kanjis pueden tener más de una lectura onyomi y kunyomi. 

Esto mismo se aplica a los números que también se escribieron en kanji, aunque después conviviesen con los números arábigos. Se pueden leer con su lectura china: 1 (一), 2 (二), 3 (三)... (ichi, ni, san) o con su lectura japonesa: (hi, fu, mi). Es más, dependiendo del elemento que queramos contar pueden adoptar una u otra lectura.  Así el número nueve se puede decir: “ku”, “ kyuu” o “ko”.

Del mismo modo, los números 4 (shi) y 9 (ku), son considerados en la cultura japonesa números de mala suerte, pues el primero, el 4 se lee igual que la palabra muerte (死 shi) y el 9, igual que la palabra sufrimiento (苦 ku). Por eso, hay hospitales que no tienen habitación 4, 14 o cualquier número que contenga el 4 o se evita tener estos números en la patente de los autos.

En tiempos en los que aún no existían ni los teléfonos móviles ni los emoticones el beeper era una máquina en la que se escribía solo con números muy popular en Japón. Por ejemplo, se podía escribir el número 4649, que se lee:  YO (4) RO (6) SHI (4) KU (9), lo que forma la palabra Yoroshiku, que es un saludo en japonés. 

Igualmente, la novela 1Q84 del conocido escritor japonés Haruki Murakami, presenta un juego de palabras en su título, emulando la de George Orwell, 1984, donde el sonido en inglés de la letra Q (kyu) coincide con la pronunciación del número 9 en japonés.

Llegados a este punto, tal vez piensen que aprender kanji es una locura y no seremos quienes les contradigan. Solo podemos decirles que, para muchos de nosotros que nos encanta la cultura japonesa, cuando somos capaces de entender las reglas del juego del kanji este nos atrapa y ya no podemos escapar.