Así lo considera el académico de la Universidad y también poeta Naím Nómez, quien sostiene que Nicanor Parra es uno de los grandes rupturistas de la poesía hispanoamericana del siglo XX. Parra, el “antipoeta” de 97 años, fue elegido este jueves (1) Premio Cervantes de Literatura 2011, galardón que ofrece el Ministerio de Cultura de España.
El hermano de Violeta Parra se impuso por sobre el nicaragüense Ernesto Cardenal, el colombiano Fernando Vallejo y el uruguayo Eduardo Galeano. “En la poesía de Parra se retorna al lenguaje común, al lenguaje oral, a una cierta sensibilidad que se había perdido”, destaca Nómez.
El “Chile fértil provincia, hacienda con vista al mar, administrada por su propio dueño”. Así, simple, directa, pero llena de contenido y profundidad en el mensaje, es la pluma de Nicanor Parra, el “antipoeta” que este 2011 recibió el Premio Cervantes de Literatura, el galardón más importantes de las letras hispanoamericanas, que entrega el Ministerio de Cultura de España.
Así lo dio a conocer la titular de la cartera española, Ángeles González-Sinde. El nombre del creador de la corriente llamada “antipoesía”, académico, matemático y físico, había circulado para el Cervantes varias veces en los últimos años y finalmente este jueves (1), superó a sus contrincantes, el nicaragüense Ernesto Cardenal, el colombiano Fernando Vallejo y el renombrado uruguayo, Eduardo Galeano.
Respecto de la competencia, y las razones que explican la entrega del galardón a Parra, el escritor y académico de la Facultad de Humanidades, Naím Nómez, asegura que “en primer lugar es un gran homenaje, porque es muy difícil que el premio lo gane un poeta, y en segundo lugar, porque consigue volver a conectarse con el mundo, con el lenguaje. Eso hace que tenga los méritos para ganarse este premio, que es tan importante”.
Gran rupturista
Parra es uno de los grandes rupturistas de la poesía hispanoamericana del siglo XX. Así lo considera el también escritor y vate de la Universidad, para quien el “antipoeta” reencantó a los lectores al hacer poesía el lenguaje de todos los días, pasando por sobre las vanguardias, no sólo en América Latina, sino también en Europa”.
“En la poesía de Parra se retorna al lenguaje común, al lenguaje oral, a una cierta sensibilidad que se había perdido”, destaca Nómez, aduciendo que el autor de 97 años ejerció una enorme creatividad sobre el hablar de todos los días para hacer su obra.
Poesía horizontal y transversal
Por su parte, Felipe Cussen, especialista en Literatura e investigador del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA), cree que “el premio conferido a Nicanor Parra tiene una correlación con su trayectoria”.
De acuerdo con Cussen, lo más rescatable de estos premios “es que permiten que se retome o se profundice la lectura de Parra” a quien personalmente confiesa admirar, a la vez que destaca que “junto con Gonzalo Rojas (el otro chileno que, además de Jorge Edwards ha recibido el Cervantes), a pesar de ser muy diferentes, son de altísimo nivel. La pluma de Parra es clave en conseguir que el poeta no sea una especia de vidente que visualiza lo que otro no, sino un tipo más que se dedica a decir lo que observa con el resto de la gente. Parra ha sido clave en fomentar una visión más horizontal de la poesía”, concluye.