“Espacios Azules para Recoleta”, es el nombre de la investigación realizada por los doctores Lucio Cañete Arratia (director del proyecto), de la Facultad Tecnológica; Enrique San Juan Urrutia, Víctor Herrera González, ambos de la Facultad de Ingeniería; y Rodrigo Vidal Rojas, actual rector y docente de la Facultad de Arquitectura y Ambiente Construido. En esta iniciativa, los académicos del Plantel configuraron alternativas de cuerpos de agua de libre acceso (piletas, fuentes, tanques, etcétera) presentes en la comuna de Recoleta.
El estudio está enmarcado en las convocatorias abiertas que realiza la Universidad Abierta de Recoleta (UAR) para investigar. Durante la iniciativa el equipo desarrolló una revisión de la literatura existente, también una consulta ciudadana telemática, visitas a terreno, entrevistas aleatorias a vecinas (os), entre otras acciones.
Estas permitieron identificar, interrelacionar y cuantificar ocho impactos positivos en la comunidad que derivan de la implementación de cuerpos hídricos; destacando la restauración ecosistémica, la creación artística y la pertenencia territorial. Igualmente, los resultados hicieron posible avanzar en el diseño conceptual de distintos tipos de cuerpos de agua según tamaño, forma y naturalidad para uso público bajo un modelo de mantenimiento comunitario, inspirado en experiencias internacionales.
El responsable del proyecto, Dr. Lucio Cañete, explica que las áreas verdes son plazas y parques, pero “los Espacios Azules (analogía con el color del cielo) no solamente contienen pasto, árboles, arbustos, entre otra vegetación, sino que también contienen conspicuos cuerpos de aguas, esto no quiere decir que no se puedan complementar”, comenta.
A juicio del docente, la iniciativa es replicable en comunas del país con climas mediterráneos o con carencia de lugares públicos de recreación. “Es una inspiración para replicar con las adaptaciones geográficas y culturales pertinentes a cada territorio”, indica.
En futuro cercano, concluye el Dr. Cañete, se espera que como Arica y Viña del Mar son conocidas como las ciudades “de la eterna primavera” y “jardín”, respectivamente, Recoleta pueda ser, sin hacer referencia a ningún equipo, “La comuna azul”.
Trabajo interdisciplinario
Al ser una investigación compleja, el estudio requería un equipo multidisciplinario para desarrollarlo. Los factores de las áreas energética, territorial y urbanística estaban cubiertas por el grupo de académicos del Plantel, sin embargo, había un factor sociológico que no era notorio en las primeras etapas del proyecto. Estas variables fueron suplidas por el equipo de la UAR, quienes visibilizaron problemáticas que surgieron durante y tras la pandemia, por ejemplo. “Fue bastante enriquecedor el trabajo”, asegura el profesor Cañete.
Por su parte, Cristóbal Feller Vergara, director de Investigación de la Universidad Abierta, señala que el grupo de académicos “realizó un trabajo muy serio, elaborando un informe final bastante sólido”, el que “ofrece una propuesta concreta en beneficio de la calidad de vida de las vecinas y vecinos en múltiples dimensiones: esparcimiento, vida al aire libre y salud mental, renovación urbana y cuidado del medio ambiente, entre otros”, detalla.
Si bien no hay fechas concretas, el sociólogo indica que se generaran “instancias de difusión y socialización con los resultados del proyecto, enfocados en las unidades municipales vinculadas al urbanismo y el medio ambiente de Recoleta y otras comunas. Asimismo, se trabaja en la edición de un libro digital derivado de este proyecto”.
Revisa el Informe completo a continuación: “Espacios azules para Recoleta”